30 Novembro 21h30 Aldeia de Santa Margarida Palheiros do Jardim Gabriel Díaz e Sara Águeda De lo divino y lo humano Tonos humanos y divinos en la España del siglo XVII Espanha “…el amor no es agua, ni es fuego, ni es tierra, ni es viento, porque solo es un caos confuso, un monstruo…” Juan Hildagho (1614-1685) El florecimiento del tono en la España del siglo XVII va sin duda ligado a la personalidad de Juan Hidalgo (1614 – 1685), arpista, compositor de la corte y fundador junto a Calderón de la Barca de la tradición operística en España. Los tonos son canciones con acompañamiento del continuo y pueden ser de dos tipos, humanos y divinos. Los tonos humanos, de temática terrenal, muestran al hombre frágil, sufriente de amor, ardiente de deseo o violento guerrero. Los tonos divinos, de temática religiosa, muestran a un hombre pío en búsqueda del éxtasis, condenando el pecado, rogando la salvación. La eterna dualidad que seguro existe desde el principio del ser humano y de la que jamás nos podremos librar porque es parte de nosotros mismos, lo humano y lo divino, el bien y el mal, el cielo y el infierno. Notas: Entrada livre, sujeita à lotação da sala. Por motivos de segurança, a porta será encerrada assim que a lotação estiver preenchida. As portas abrem 30’ antes do início do concerto. Gabriel Díaz, contratenor Sara Águeda, harpa de duas ordens Programa: Ah de la vaga región, Sebastián Durón (1660-1716) Solo es creer, Juan Hidalgo (1614-1685) Tened, parad, suspended elementos, Juan Hidalgo Quando Podré lograrte, Juan Bonet de Paredes (1647-1710) Achas, Lucas Ruíz de Ribayaz (1626-1667) orazón causa tenéis, Sebastián Durón A quién me quejaré, Anonimo Expiración divina, Sebastián Durón Españoletas, Lucas Ruíz de Ribayaz No queráis dormir mis ojos, Juan Hidalgo Ay amor, ay ausencia, Juan Hidalgo Airecillos suaves, Gómez de Navas (1647 – 1709) Canción Alemana, Diego Fernández de Huete Ay que me rio de Amor, Juan Hidalgo El agua del llanto, Juan Hidalgo Esperar, sentir, morir, Juan Hidalgo Notas ao programa La Figura de Juan Hidalgo tiene una importancia capital en la música española del siglo XVII. Después de crecer en el taller de instrumentos de su abuelo y su padre inicia su carrera en 1630 como músico de la corte de Felipe IV tocando el arpa de dos ordenes, llamada así por la curiosa colocación de las cuerdas a cuyo orden de cuerdas diatónicas habitual se añadió una orden de cuerdas cromáticas entretejidas o entremetidas con las diatónicas, invento sumamente práctico para los violeros españoles y, al parecer, no utilizado fuera de la Península Ibérica. Esta colocación permitía una escritura musical mucho más cromática, con posibilidad de moverse en mayor cantidad de tonalidades y obedece a la evolución armónica que experimenta la música a finales del renacimiento y principio del barroco. En 1645 Hidalgo empieza a trabajar como compositor de música de teatro de la corte, cargo que le permitió desarrollar toda su creatividad en el campo de la música escénica y convertirse en uno de los pioneros de la composición operística en España. El nombre de Juan Hidalgo no puede desligarse del de Pedro Calderón de la Barca, director del Coliseo del Buen Retiro de Madrid en esa época y creados de varios de los libretos que Hidalgo usaría en sus óperas como La Púrpura de la Rosa o Celos aun del Aire Matan, ésta última considerada el primer intento de fiesta real de ópera cantada que se conserva en España. El tandem Hidalgo-Calderón se mantuvo durante bastantes años dando lugar a la producción de más de nueve títulos entre zarzuelas, óperas o comedias pastorales. El otro género en el que Hidalgo destacó sobremanera fue el del tono. Género que nos ocupa en este programa. Los tonos son canciones escritas en lengua romance con acompañamiento del continuo. Teniendo en cuenta que Hidalgo fue un gran arpista a la vez que un compositor de tonos podemos imaginar que muchos de ellos estaban pensados para ser acompañados con el arpa. Los tonos pueden ser de dos tipos, humanos y divinos. Hidalgo destacó como compositor de tonos humanos, quizás por su carácter de compositor de teatro aunque mucho de sus contemporáneos cultivaron el tono divino de carácter mucho más piadoso. Los tonos humanos, de temática terrenal, muestran al hombre frágil, sufriente de amor, ardiente de deseo o violento guerrero. Los tonos divinos, de temática religiosa, muestran a un hombre pío en búsqueda del éxtasis, condenando el pecado, rogando la salvación. La eterna dualidad que seguro existe desde el principio de los tiempos y de la que jamás nos podremos librar porque es parte intrínseca del ser humano, lo humano y lo divino, el bien y el mal, el cielo y el infierno. Gabriel Díaz Sara Águeda. Inicia sus estudios en el Conservatorio Arturo Soria de Madrid. En 2005 accede al grado superior de música en el Conservatorio Superior de Música de Zaragoza (CSMA) y al mismo tiempo comienza su andadura en la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC) como músico de escena en la que participa en los siguientes montajes: El viaje del parnaso de Miguel de Cervantes, Don Gil de las calzas verdes de Tirso de Molina, Las manos blancas no ofenden de Calderón de la Barca, El condenado por desconfiado,atribuida a Tirso de Molina y El perro del Hotelano de Lope de Vega. Su función en estos montajes es rescatar el extenso repertorio de tonos humanos y música instrumental que formaba parte del paisaje teatral del Siglo de Oro español (teatro palaciego y de corral de comedias). Con la compañía realiza numerosas giras nacionales (Sevilla, Barcelona, Toledo, Valencia, Bilbao, Coruña, Logroño…) e internacionales (Lisboa, Buenos Aires, Montevideo…). Ésto le lleva a realizar investigaciones cada vez más profundas acerca de la música en el teatro desarrollando su proyecto de fin de carrera sobre la importancia del arpa en el contexto teatral de los siglos XVI y XVII en España, por lo que comienza a profundizar en el estudio del arpa de dos ordenes con la profesora Nuria Llopis descifrando manuscritos y tratados originales para este instrumento (Huete, Ribayaz, Cabezón, MS 2478, MS816, Martin y Coll…). El gusto por la música antigua le lleva a la Escuela Superior de Música de Cataluña (ESMUC) para completar su formación como arpista histórica con Mara Galassi, con la que trabaja repertorio del renacimiento y barroco italiano (Frescobaldi, Luzzaschi, Monteverdi, Peri, Sigismondo d´India, Trabacci, Ascanio Mayone…) e inglés (Dowland, Händel, Lawes…). También ha recibido clases de Pedro Memelsdorff, Manfredo Kraemer, Xavier Díaz-Latorre, Josep Borrás, Monica Pustilnik entre otros. Ha participado en numerosos ciclos de música antigua como la Música en los Barrios (Segovia), el Castillo de Manzanares el Real (Madrid), Festival de Clásicos en Verano (Madrid), Loulé (Portugal), Ambronay (Francia), Pavía (Italia), Sancti Iohannis (Alicante) o el festival de teatro clásico de Almagro (Cuidad Real). Y ha colaborado con grupos de música antigua entre ellos Música Ficta, La Capilla Jerónimo de Carrión, Telemann Ensemble, La Ritirata, Alfonso X el Sabio, Coro de la Comunidad de Madrid, Coral de cámara de Pamplona, Capella Sanctae Crucis, Capella de Ministrers… Ha formado parte del proyecto pedagógico L´Orfeo de Monteverdi en el Teatro Real de Madrid y ha realizado grabaciones con Nova Lux, Los Afectos diversos, La Ritirata y La Capilla Extremadurensis. Gabriel Díaz. Nacido en Sevilla (España). Inicia sus estudios musicales de piano para más tarde dedicarse de lleno al canto y la interpretación histórica. Inicia su formación vocal dentro del proyecto Coro Barroco de Andalucía donde recibe clases regulares de Carlos Mena, Lambert Climent y Lluis Vilamajo. En 2005 se traslada a Londres donde estudia en el Trinity College of Music con el contratenor Timothy Travers-Brown, Philip Thorby y Stephen Preston. Trabaja habitualmente con multitud de grupos españoles y europeos como La Capella Reial de Cataluña (Jordi Savall), Choeur de Chambre de Namur (Leonardo García Alarcón), La Grande Chapelle, Musica Ficta, Capilla Real de Madrid, Los Músicos de su Alteza, Vox Luminis, Musica Saeculorum, entre otros. Ha actuado en los pricipales auditorios españoles como auditorio Nacional de Madrid, Auditorio de Barcelona, León, Castellón, Girona, Cuenca, Zaragoza y Santiago, así como en multitud de festivales como Festival de Musica Antigua de Sevilla, Ubeda y Baeza, Málaga y La Laguna, Festival de Música Religiosa de Cuenca, Siglos de Oro de Cajamadrid, Festival Mozart de La Coruña, Musikaste de Errentería, Quincena Musical Donostiarra de San Sebastián, Festival Laus Polyphoniae (Amberes), De Singel (Amberes), Palais de Beaux-Arts (Bruselas), Musica Sacra Maastricht, Tag der Alten Musik in Alden Biesen (Bélgica), Citè de la Musique (París), Rencontres d’Art Vocal de Noirlac, Abadia de Fontfroide, Festival de Radio France (Montpellier), Festival d’Arques la Bataille, Festival Île de France, Colegio Español de Roma, Musica Brixen, Festival Bach de Leipzig, Festpielhaus Baden-Baden, National Theatre (Londres), Greenwich Early Music Festival, Estyriarte (Graz), Osterklang Festival (Viena), Festival Misteria Paschalia (Cracovia), Institutos Cervantes de Casablanca y Rabat, Festival de Música Antigua del CENART (México), Festival Cervantino (México), Festival de Música Antigua de Lima (Perú). Ha interpretado el rol de Melissa en la ópera “La Liberazzione di Rugiero” de Francesca Caccini en el Teatro Jovellanos de Gijón bajo la dirección de Furio Zanasi y Roberto Gini. Ha sido invitado a impartir cursos por la Universidad de Málaga, Muestra de Música Antigua Castillo de Aracena, Coro de la Sociedad Musical de Sevilla y Sistema nacional de Fomento Musical de México. Durante abril y mayo de 2013 será el director invitado del Coro de Madrigalistas de Bellas Artes de México. Ha realizado dos grabaciones para el sello francés Alpha con el grupo aragonés Los Mvusicos de su Alteza; uno con villancicos de Joseph Ruiz Samaniego y otro con oratorios de Carissimi y Rossi. Asimismo ha realizado grabaciones para los sellos Almaviva, Enchiriadis y Laudamusica.
